Estrategia Nacional de Conservación de Aves 2021-2030

La biodiversidad está declinando rápida y globalmente como resultado de actividades antrópicas no sustentables, las que han llevado a una pérdida y degradación de gran parte de los ecosistemas naturales a nivel mundial. Las aves y sus hábitats se ven desafiados por un gran número de amenazas en el país, desde aquellas transversales (ej. cambio climático y especies exóticas invasoras) hasta las particulares asociadas a un grupo de aves y/o ecosistemas (ej. captura incidental). Esto se evidencia en los resultados del Reglamento para la Clasificación de Especies en Chile, siendo que al año 2022 se había evaluado el estado de conservación de 114 especies y tres subespecies de aves, de las cuales el 50% han sido clasificadas como especies amenazadas (En Peligro Crítico, En Peligro o Vulnerable). 
 
En este contexto, durante el año 2020 se inició un proceso para desarrollar una nueva Estrategia Nacional de Conservación de Aves, conducido por el Ministerio del Medio Ambiente. La primera Estrategia para la conservación de aves en Chile fue publicada el año 1992, por el SAG y la Unión de Ornitólogos de Chile; posteriormente, la Unión de Ornitólogos de Chile en conjunto con la Universidad de Chile coordinó la elaboración de una nueva estrategia, publicada el año 2004. Desde entonces, la información y el conocimiento disponible de las aves se ha incrementado de manera importante, siendo posible publicaciones como el Atlas de las Aves Nidificantes de Chile. Además, en este tiempo las amenazas que afectan a las aves también han incrementado, incluido el cambio climático que lo está haciendo a tasas mayores de las previamente proyectadas. Por último, la institucionalidad ambiental en Chile ha tenido importantes cambios en los últimos años, siendo lo más importante fue la conformación de un Ministerio del Medio Ambiente el año 2010, pero además en la actualidad hay un conjunto más amplio de organizaciones de la sociedad civil con orientan sus esfuerzos en la conservación de las aves.
 
La Estrategia Nacional de Conservación de Aves 2021-2030 (ENCA) fue publicada finalmente en 2022, siendo la primera estrategia coordinada por el Estado, pero a la vez elaborada en conjunto con organizaciones civiles y la academia. Se trata de un esfuerzo fundado en la mejor información disponible, y con un enfoque ecosistémico, con el objetivo fortalecer la conservación de las aves y sus hábitats en Chile, definiendo lineamientos de acción y articulando esfuerzos, personas y entidades en diversos territorios del país.
 
Para abordar las amenazas a las aves y sus hábitats, en Chile, se definieron ocho líneas de acción, cada una con un conjunto de acciones asociadas: (1) fomentar la investigación y monitoreo de aves, (2) crear y fortalecer alianzas para la conservación, (3) fortalecer políticas públicas, (4) promover el cumplimiento de la normativa, (5) incentivar e innovar en prácticas sustentables del sector productivo, (6) atraer recursos para la implementación de acciones, (7) elaborar instrumentos de gestión en conservación (8) empoderar y vincular a la comunidad

¿Qué hacemos?

Iniciativas en el sitio

Con la visión de que la conservación de las aves es un desafío que debe abordarse de forma colaborativa y urgente, y que debe contar con el liderazgo del Estado pero integrando un conjunto amplio de actores, la ROC promovió la generación del proceso de la ENCA en sus inicios. A lo largo del tiempo que implicó la elaboración de esta estrategia, durante los años 2020 y 2021 la ROC participó activamente como parte del Grupo Núcleo que coordinó este proceso.

Implementación

La ROC integra el Comité de Implementación de la ENCA, comité que tiene por objetivo generar e impulsar mecanismos de trabajo colaborativo para la implementación de la ENCA, aunar esfuerzos y articular sinergias con otros instrumentos de políticas públicas para la conservación de las aves y sus hábitats en Chile.
 
Asimismo, la ROC forma parte del Consejo Directivo de la ENCA para el periodo 2023-2024, con las funciones de coordinar el accionar del Comité, proponer lineamientos y prioridades de trabajo, constituir grupos de trabajo, coordinar el Comité con los diversos planes de conservación existentes, entre otras.
 
Por último, la ROC ha buscado contribuir en diversas líneas de acción definidas en la ENCA, incluyendo el diseño del plan de monitoreo de aves, la identificación de sitios de importancia para aves playeras y marinas, y el desarrollo del plan para la conservación de aves playeras. Para la ROC, las líneas de acción establecidas de forma colaborativa en la ENCA constituyen uno de los principales ejes orientadores para definir sus prioridades institucionales. En este sentido, como organización buscamos contribuir de forma decidida en el desafío que constituye la implementación de esta estrategia. Para más información, visita el sitio web de la ENCA.

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