La visión de la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile es promover la conservación y protección de las aves y sus hábitats, a través de la creación de alianzas que permitan tomar decisiones con la mejor información posible. Para ello, promovemos planes de conservación, programas de educación, y fomentamos que las actividades económicas eviten el impacto sobre la biodiversidad
La Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile se rige por los siguientes principios orientadores:
La ROC es una comunidad de amantes de la naturaleza y de las aves, en la que organizamos salidas para aficionados al pajareo con distintos niveles de conocimiento en diversas regiones del país. Además, disponemos de numerosos materiales de difusión como libros, infografías y elementos audiovisuales para extender el conocimiento sobre las aves y construir una sociedad más consciente sobre la biodiversidad.
Nuestra organización es un activo actor en generación de conocimiento entorno a las aves de Chile. Desde 2009 administramos la plataforma eBird en el país,en 2018 publicamos el primer Atlas de las Aves Nidificantes de Chile, siendo este el primero de estas características en Latinoamérica.
Asimismo desarrollamos distintos esquemas de monitoreo, tales como los Censos Neotropicales de Aves Acuáticas y Migratory Shorebird Project y emprendemos diferentes iniciativas de ciencia escolar.
Además, participamos en distintos procesos de planificación de la conservación identificando sitios de importancia para aves marinas y playeras, proponiendo la clasificación de especies según su estado de conservación. También nos involucramos en planes de conservación como los Planes de Recuperación, Gestión y Conservación de golondrinas de mar en el norte de Chile y de gaviotín chico. En la misma línea impulsamos y fuimos parte del proceso de elaboración de la Estrategia Nacional de Conservación de Aves.
Igualmente implementamos acciones de conservación, generalmente acompañados de actores locales. Algunos ejemplos de ello son administración de áreas protegidas, instalación de cercos simbólicos y de señalética. En la misma línea rescatamos golondrinas de mar en el norte de Chile y organizamos distintos festivales de aves.
Finalmente, utilizamos y alentamos la creación de instrumentos de gestión y política pública, tales como normas referidas a la contaminación lumínica y a ordenanzas municipales de protección de ecosistemas costeros.