Furnárido pequeño y críticamente amenazado, endémico de la isla Alejandro Selkirk en el archipiélago de Juan Fernández. Actualmente su población se estima en menos de 500 individuos. Prefiere ambientes boscosos de altura, asociados a cuerpos de agua y arroyos. Su plumaje es mayormente gris parduzco, alas negras con ribetes blancos y cola larga y espinosa. En la cabeza destaca su ceja oscura y pico negruzco de base amarillenta. Su reproducción ha sido poco estudiada, pero utiliza pequeñas grietas naturales sobre el nivel del suelo. Su alimentación se basa principalmente en arañas, polillas y pequeños frutos, que busca de forma acrobática entre la vegetación. Entre sus múltiples amenazas se describen la degradación del hábitat a partir de incendios forestales y la introducción de cabras, así como la depredación por parte de especies invasoras como roedores y gatos, que cazan huevos polluelos y adultos.