Chile es uno de los países de mayor relevancia para la conservación de aves marinas en todo el planeta, muchas de las cuales nidifican y se alimentan gran parte del año en las aguas de nuestro territorio. La enorme cantidad de islas (más de 43.000 según últimos registros) y la presencia de enormes corrientes ricas en nutrientes y alimento; como la corriente de Humboldt y la corriente convergente de la Antártica, proveen un ambiente idóneo para los ciclos de vidas de albatros, fardelas, petreles, golondrinas de mar y otros grupos de aves marinas.
Sin embargo, múltiples amenazas han afectado a este grupo de especies en las últimas décadas, conllevando a que en la actualidad, las aves marinas se encuentren entre las especies más amenazadas en el planeta.
En este contexto, el Ministerio del Medio Ambiente, junto a Audubon Chile y más de 20 instituciones públicas, centros de investigación y organizaciones sociales, entre ellas la ROC, presentaron el Plan de Acción para la Conservación de Aves Marinas en Chile, una iniciativa que forma parte de la Estrategia Nacional de Conservación de Aves, cuyo objetivo es fortalecer la protección de las especies marinas y mitigar las principales amenazas que enfrentan en el territorio nacional, mediante 35 acciones concretas distribuidas en ocho lineamientos estratégicos.

Para efectos de este plan, se contabilizaron 131 especies en total, las cuales agrupan diversos grupos que conviven naturalmente con el mar y sus costas. En específico se agruparon especies de albatros, fardelas y petreles (Procellariformes), gaviotas, gaviotines y playeros (Charadriiformes), piqueros y cormoranes (Suliformes), pingüinos (Sphenisciformes), aves del trópico (Phaethontiformes), pelícanos (Pelecaniformes), churretes (Passeriformes), gansos y patos (Anseriformes).
En especifico, el plan aborda los principales desafíos que enfrentan estas aves, como la reducción de la captura incidental en pesquerías, una de las causas más críticas de mortalidad. Para ello, propone evaluar y promover medidas de mitigación, desarrollar mecanismos de monitoreo y registro de captura incidental en la pesca artesanal, e impulsar la cooperación internacional para enfrentar esta problemática de manera coordinada.
Otro eje prioritario es el control del ingreso de vehículos a playas y dunas, mediante la creación de una mesa de trabajo entre la autoridad marítima, Carabineros y municipalidades para implementar un programa de fiscalización, especialmente en temporada reproductiva y en sitios de alta relevancia para las aves marinas.
El plan también considera acciones de prevención, control y erradicación de especies exóticas invasoras en lugares de nidificación y descanso de aves marinas, así como la reducción de la contaminación lumínica, identificando las comunas más afectadas y promoviendo el cumplimiento de la nueva Norma Lumínica.
Asimismo, el plan identifica más de 200 sitios de importancia para las aves marinas en el país, utilizando criterios KBA e IBA. La identificación y delimitación de los polígonos y sectores de reproducción en las diversas especies de golondrinas de mar y gaviotín chico es una de las labores que ha impulsado y llevado a cabo la ROC junto al Ministerio de Medio Ambiente en los últimos años. La correcta delimitación de los sitios de relevancia para estas especies es una herramienta útil para la toma de decisiones, la protección efectiva y la investigación.
De manera transversal, este documento fomenta la investigación y monitoreo de aves y la generación de nuevas políticas públicas que permitan resguardar los ecosistemas costeros y marinos del país. Además, busca fortalecer la cooperación entre el Estado, la comunidad científica y las organizaciones ambientales para avanzar hacia una gestión integrada de la biodiversidad marina.
“Desde la ROC destacamos también las líneas de acción de la ENCA y este Plan relacionadas al fortalecimiento de alianzas para la conservación de las aves marinas amenazadas. En especial aquellas cuyo objetivo es identificar y potenciar sinergias con las acciones establecidas en los Planes RECOGE de especies en las que la ROC actúa, tales como el de golondrinas de mar del norte de Chile y el de gaviotín chico. El trabajo colaborativo entre instituciones y equipos multidisciplinarios son claves para atender las distintas aristas que conlleva la conservación de estas especies”, enfatiza Pablo Gutiérrez Maier, integrante del Programa de Aves Marinas ROC.
De esta manera el Plan de Acción para la Conservación de Aves Marinas en Chile se elabora como un instrumento de planificación que busca ser un marco nacional para guiar los esfuerzos de diversos actores y sectores, con el fin de aumentar y fortalecer la capacidad de proteger estas especies, tanto a nivel internacional como nacional, regional y local. El Plan de Acción será complementario a la ENCA y permitirá orientar acciones prioritarias para la conservación de este grupo altamente amenazado, enlazando acciones a escala nacional planteadas en la Estrategia Nacional de Conservación de Aves 2021-2030.
Accede al Plan de Acción para la Conservación de Aves Marinas en Chile acá.