Distintiva ave de hábitos terrestres que se distribuye en gran parte de Argentina y en el extremo sur de Chile, con diez subespecies descritas. Habita ambientes de matorral rocoso, campos abiertos, pastizales y cerros áridos, frecuentemente en pareja o pequeños grupos familiares. En Chile la subespecie patagonica se encuentra solamente en unos pocos sectores de las regiones de Aysén y Magallanes. Posee un plumaje críptico de dorso grisáceo, pecho barrado oscuro, patas gruesas blanquecinas y en la cabeza destacan un grupo de plumas negras en forma de copete, que le otorga su nombre común. A menudo es detectada por sus notorias vocalizaciones y si siente algún peligro se adentra corriendo entre la vegetación, evitando volar. El nido es una oquedad en el suelo arenoso, protegido con arbustos y ambos miembros de la pareja participan de su elaboración. Sus huevos son de un vistoso color verde metálico, incubados exclusivamente por el macho. Las pequeñas poblaciones descritas en Chile enfrentan duras amenazas, como la caza, la recolección de huevos y el cambio de uso del suelo.